La Xunta de Galicia da ayudas a los propietarios de mastines en su plan de lucha contra los ataques del lobo ibérico .

Lo que en principio parece una buena noticia se ha convertido una vez más en una nueva picaresca en la que las víctimas son esta vez los perros. Las protectoras de Lugo se han visto desbordadas con peticiones de adopción de mastines y curiosamente  a poder ser mayores ( según educadores, veterinarios y ganaderos el mastín solo puede hacer bien su trabajo si es entrenado desde pequeño junto al ganado) menos mal que debido a la avalancha de peticiones el engaño saltó enseguida .

La cuantía máxima a la que pueden optar con estas ayudas es de 3.750 euros (70 euros por hectárea, con un máximo de 50 hectáreas, y con los requisitos de tener un mínimo de animales y un compromiso de cinco años).

La ayuda deja totalmente desprotegido al animal, que evidentemente no va a ser empleado para el cuidado del ganado, además de poner a las protectoras en un grave aprieto, pues no se pueden dar animales en adopción para trabajar.

Ha habido personas que han llamado a veterinarios, por muy increíble que parezca, para que le cambiase la raza de su perro en la cartilla y así poder optar a las ayudas.

Una vez más las autoridades no cuentan con veterinarios, protectoras, y en este caso ni siquiera avisan, para la toma de decisiones que nos tocan muy de cerca a nosotros y a nuestros animales.